#40NC12 Mikel Buil: "Son ilusionantes las redes de solidaridad que se han construido en los pueblos"
#40NavarrosConfinados por Pedro Pérez Bozal
Mikel Buil García es una rara avis en la política: este sociólogo es capaz de ser escuchado a pesar de que su tono sosegado choca con la algarabía que despegan sus adversarios políticos y compañeros de Cámara en el edificio más famoso de la pamplonica calle de Navas de Tolosa. El portavoz de Podemos en el Parlamento de Navarra nos ha regalado una entrevista tan reflexiva como recomendable:
¿Cómo estás llevando el confinamiento a nivel personal y profesional?
Debo reconocer que en estado de confinamiento y teletrabajando hay una invasión de lo profesional en lo personal muy importante. Más si cabe con el enorme grado de responsabilidad que tiene nuestra tarea cotidiana. Una decisión adecuada en un momento concreto puede salvar vidas o por el contrario poner en riesgo a muchas personas.
En las diferentes recomendaciones psicológicas para llevar bien el confinamiento se prioriza la de evitar excesos de información y mensajes de alarma, algo que nosotros no nos podemos permitir. Diariamente realizamos análisis de la situación desde muchos ámbitos, no solo el sanitario, que es el más duro. También analizamos lo que tiene que ver el número de fallecimientos, contagios, altas, disponibilidad de recursos sanitarios y ámbitos social, económico, político e internacional.
A pesar de esto, que es nuestra responsabilidad, en lo personal estoy descubriendo cosas muy positivas como nuevas formas de relacionarme a través de las redes, nuevas recetas de cocina y nuevos compases de mi guitarra, que cogía polvo desde que entré en política.
Como sociólogo: ¿cómo estás viendo la respuesta ciudadana en estos momentos?
En shock y con mucha dificultad para el análisis porque hay demasiada intoxicación mediática y política. Creo que como sociedad nos va a costar bastante tiempo incorporar este episodio histórico a nuestro sistema. De la misma manera que ocurrió con la crisis del 2008, cuya reacción se materializó en el 2011 a través del movimiento 15M.
En todo caso, cuando 'la mancha de la precariedad y la pobreza' se extiende sobre las clases trabajadoras siempre hay cambios que alteran el orden y en este caso los cambios no estarán ligados a lo local u autonómico: serán globales.
Podrá darse una nueva oportunidad para defender que los derechos deben ser universales, es decir, para todo el mundo por igual y retomar como sociedad esta necesidad. Las imágenes sobre cómo se está tratando a los refugiados dan cuenta de que venimos de un deterioro progresivo en la defensa social y política de los derechos universales.
Algo ilusionante, y que deja clara la fortaleza de gran parte de la población en esta convicción, son las redes de solidaridad que se han construido en pueblos y barrios de nuestra comunidad para atender a quién peor lo está pasando en este confinamiento.
La fuerza opuesta, y muy poderosa en estos momentos, tiene su máxima expresión en el cierre de fronteras y países y el impulso autoritario gracias a la diatriba libertad/seguridad en el que la ultraderecha se encuentra muy cómoda. Ojalá no tengamos que padecer este último extremo para reaccionar hacia el siguiente. Los movimientos y valores sociales en democracia, muchas veces, se mueven de forma pendular, de un extremo al otro.
Imagino que la gente ha pasado por una montaña rusa emocional y ahora mucha gente empieza a ver la luz al final del túnel...
Es el momento más delicado: uno puede asumir y llevarlo relativamente bien, porque entiende la situación: va a estar confinado quince días y otros quince y otros quince. Pero cuando el desgaste ya es importante y los anuncios de salida son ambiguos... un día más o un día menos puede vivirse como si fuera un mes. Es el momento de ser lo más claros posibles desde los puestos de mando.
¿No cree que las administraciones públicas apenas han dado importancia a los asuntos psicológicos durante el confinamiento?
Decía lo de 'ser lo más claros posibles desde los puestos de mando' y creo que la palabra clave es la de 'posibilidad'. Hemos visto mensajes contradictorios, que son los que más daño psicológico pueden hacer porque con el mismo dato se puede llegar a diferentes conclusiones. Una de las palabras clave de esta pandemia es la de 'incertidumbre' y creo sinceramente que aportar certidumbre en un escenario tan sorpresivo es prácticamente imposible.
En todo caso, para la siguiente pandemia, que vendrá, deberíamos estar mucho mejor preparados para aportar certidumbres a través de test, con disponibilidad de recursos sanitarios y con apoyo de equipos científicos bien dotados y a pleno rendimiento. Creo que esta lección está aprendida y la sociedad mantendrá el pulso.
El consejero Eduardo Santos ha denunciado la desprotección de los migrantes durante esta crisis sanitaria. ¿Se han conseguido algunos avances en esta materia?
Sí, se ha avanzado y mucho porque los recursos específicos en la Comunidad Foral estaban dispersos en diferentes departamentos. El trabajo de unificar servicios, procedimientos y comenzar a trabajar sobre planes integrales es un gran avance que debe dar cuenta de lo valiosa que es la migración y su aporte de riqueza en todos los sentidos a nuestra comunidad.
En todo caso, como sabes las competencias para regularizar a personas extranjeras no las tiene Navarra. Desde aquí estamos ejerciendo presión para cambiar las cosas y eso lo estamos haciendo desde la Consejería de Políticas Migratorias y Justicia, llevando el debate hacia Madrid.
La Consejería ha gestionado que personas migrantes puedan trabajar en esta crisis en el ámbito sociosanitario. Y se ha puesto en marcha una nueva normativa por parte del ministerio sobre la regularización de personas migrantes para el trabajo agrícola.
Lo que no puede ser es que les pidamos que trabajen, porque nuestros sanitarios están enfermando o porque no hay nadie para recoger el producto de temporada de los campos, y en cuanto acabe esta crisis les demos la patada porque supuestamente ya no los necesitamos. La apuesta desde Podemos es que si queremos que trabajen, sea con todos los derechos.
Hace unas horas denunciabas que a la gente más desprotegida se le abocaba a la vía telemática para pedir ayudas cuando muchos no tienen siquiera ordenador. ¿Por qué las administraciones parecen estar tan alejadas de la ciudadanía que más sufre?
Las administraciones llevan a cabo el mandato de las cámaras legislativas como el Parlamento, cámara en la que queda expresada la voluntad popular a través de las votaciones que cada persona realiza cuando va a votar.
Hoy Navarra Suma, UPN antes, que fue el partido de los recortes en todos los servicios públicos (Sanidad, Educación y Protección social durante la anterior crisis), tiene veinte parlamentarios en el Parlamento de Navarra y gobierna los ayuntamientos más importantes de Navarra.
En la Comunidad hay un gobierno progresista en minoría y nuestra formación, cuya principal lucha es la garantía de derechos para todos y para todas, tiene dos parlamentarios en Navarra y ningún concejal en Tudela y Pamplona.
Más allá de otros factores, que estoy convencido de que han influido en este resultado, creo que cuando la gente asume la precariedad y cierto grado de exclusión social entre sus vecinos, asume también los valores de la Ley del más fuerte: algo necesario para sobrevivir que no para vivir.
Muchas veces el problema no está en tener derechos, con leyes preciosas e inspiradoras. Sino en acceder a ellos. De ahí que pongamos sobre la mesa la necesidad de reducir la burocracia. Al fin y al cabo, la Administración tiene todos nuestros datos y en muchos casos el exceso de trámites y requisitos no deja de ser un mecanismo de control innecesariamente farragoso desde el punto de vista técnico y más orientado al control social de esos vecinos en exclusión de los que se sospecha cierto grado de holgazanería. La vía telemática es una gran oportunidad para reducir esta burocracia pero por ahora está más dirigida a votantes de clase trabajadora con recursos técnicos que no tienen problemas como la brecha digital.
¿Cómo valoras el papel de Podemos en el Gobierno central?
Fundamental para impulsar una salida a esta crisis que no vuelva a suponer políticas austericidas con recortes y privatizaciones. Es vital mantener clara la prioridad sobre el gasto público o esta crisis supondrá la puya definitiva para todas las personas que han pagado la crisis anterior y que durante la última década no se les ha permitido levantar la cabeza, especialmente y como siempre a las mujeres.
Las medidas sociales tomadas hasta el momento han sido la financiación de ERTES con garantías de reincorporación al trabajo, la prohibición del despido, las moratorias y quitas hipotecarias, la prestación para autónomos por cese de actividad, la generación de una prestación para trabajadoras temporales que no hayan cotizado lo suficiente, o la apertura de un debate sobre la necesidad de un ingreso mínimo vital que palíe la pobreza infantil en nuestro país. Todo esto creo que que da buena cuenta de la importancia que tenía la eterna negociación que todos padecimos para conformar un Gobierno de coalición.
¿No crees que Iglesias está teniendo la piel muy fina con algunas críticas cuando los aires del 15M implicaban tener un discurso muy contestatario contra los gobiernos, fuese cual fuese su color?
Los ataques de la derecha, ultraderecha, poderes económicos y mediáticos a la unidad de la coalición centrándose especialmente en desprestigiar a Pablo Iglesias y también al presidente Sánchez requieren de una defensa a vida o muerte. Lo que nos jugamos en esta batalla no es quien está en el poder. Sino qué respuesta damos a la población ante una amenaza de primer orden a su subsistencia.
La crítica y la autocrítica son absolutamente necesarias, como también lo son las discrepancias incluso públicas dentro del Gobierno de coalición. Pero el mantenimiento de este proyecto progresista inédito en la historia reciente de España debe tener a sus protagonistas muy atentos ante la intoxicación mediática con las críticas destructivas y bulos que se están generando desde los sectores más extremistas.
¿Es cierto que el Ayuntamiento de Pamplona ha cometido desahucios en pleno estado de alarma?
Sí, fue en mi calle y pude hablar con los protagonistas y también con los educadores de calle que desmentían a Navarra Suma. Habrá tiempo de poner las cosas en su sitio y ver si tienen responsabilidades de algún tipo por incumplir la moratoria sobre desahucios que se aplica en el Decreto de estado de alarma.
¿Qué es lo que has aprendido durante el confinamiento?
Supongo que como todas las personas confinadas en el planeta: a echar de menos la naturaleza, la libertad y el contacto con los míos. Buen momento para hacernos una idea muy remota y desde la comodidad de nuestras casas de lo que puede ser estar en prisión, un castigo extremo.
También a calibrar mejor en qué momento personal me encuentro. Estoy mirando más hacia dentro para volver a darme cuenta de que mis propias inquietudes individuales son mucho más comunes que individuales y que este barco es más frágil y delicado de lo que pensaba.
Hay un frase un tanto filosófica que resume bastante bien la sensación de fragilidad de la vida humana a la que nos ha enfrentado el coronavirus y también la suerte que tenemos por estar vivos. Dice algo así como que 'al fin y al cabo la humanidad, navega por el universo montada en una roca a millones de kilómetros por hora'. Dicho esto, disfrutemos del viaje.
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