Reseteando Trenasa: a la espera de la lista de despidos y de 28 trenes franceses






La plantilla de Trenasa validó ayer por mayoría un acuerdo entre el Comité de Empresa y el Grupo CAF que implica el despido o recolocación de la mitad de los 110 trabajadores de la planta sita en Castejón. 

Comisiones Obreras, que controla el Comité, se ha felicitado por el acuerdo que evita el cierre y asegura que harán "todo lo posible para que Trenasa continúe con su actividad y asegurar así el empleo en una zona de Navarra especialmente castigada por el desempleo. El sindicato además quiere felicitar a sus afiliados y afiliadas y al conjunto de la plantilla por desarrollar una campaña de movilización ejemplar, así como una lógica negociadora ambiciosa y responsable". 

El colectivo Trenasa en Lucha se ha lamentado en redes porque este acuerdo deja abierta "la posibilidad de cerrar sin negociar el año que viene", implica el mantenimiento de "un ERTE salvaje hasta abril y prorrogable" y no facilita "ningún tipo de estabilidad o garantía. Como alternativa a esto la rendición total, nada de seguir luchando, hemos tocado el cielo y vuelta 'pabajo'", añaden. 

Esperando listas y trenes

CAF incentiva con 5.000 euros extra a los empleados que se presenten voluntarios a ser despedidos. A este juego macabro, que acaba este próximo martes, se ven 'obligados' a jugar algunos eventuales o trabajadores con no demasiada trayectoria en la empresa.

La dirección de Trenasa por su parte ya piensa en los próximos meses. Y es que, tal y como explican fuentes sindicales a e-Ribera.com, "en los próximos meses podríamos rehabilitar 26 trenes de Francia que en principio iban a ser destinados a la planta de CAF en Zaragoza. Este encargo de rehabilitación podría mantener la actividad para la mitad de la plantilla actual de Castejón". 

Otras voces no piensan en encargos futuros y piensan incluso que CAF no tenía en mente cerrar y ha conseguido promesas de contratos de mantenimiento con Renfe gracias a que el Gobierno de España ha escuchado el ruido provocado por la lucha obrera... y por medios de comunicación afines a la multinacional. 

Teorías de la conspiración aparte, lo que está claro es que se avecinan unos días dramáticos en la planta de Trenasa, que tras más de un mes de protestas (algunas de ellas advertidas de forma acertada por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado), ven como acaba la lucha sin cierre... pero con un regusto amargo.