5 motivos por los que Pachi Yanguas y UPN se equivocan








El Partido Popular de Navarra amenazó ayer al Gobierno de Navarra con el artículo 155 a través de su portavoz parlamentaria, Ana Beltrán. No extrañan las palabras de la presidenta del PPN por cinco motivos: el PP fue fundado por 7 ex ministros de Franco; 8 de sus 11 diputados en el 78 no votaron a favor de la Constitución; el PP se ha mostrado contrario a la Ley del divorcio, la del aborto o la del matrimonio homosexual; la misma formación ha sido contraria a cualquier medida contra los héroes de la cacería del 36; y además Rajoy y los suyos cuentan con 800 cargos imputados por corrupción. Es decir, el PP es una de las formaciones más reaccionarias de Europa y es por ello que UPN ha calculado desde siempre una distante cercanía con los populares con la intención de no irse a la derecha.

Pero UPN fue incapaz de digerir unos resultados democráticos que le echaban del Gobierno de Navarra y de 19 de las 20 ciudades más pobladas de la Comunidad Foral. Y después de haber hundido nuestra mejor herramienta financiera, Caja Navarra, y tras haber perdido por obligación de su discurso las palabras "honradez" y "gestión", ahí tienen su megalomanía que ha hipotecado a varias generaciones de navarros, se han echado al monte. Lo ha hecho para tapar la falta de carisma de Esparza, con la vascofobia como bandera y con varios guiños a la extrema derecha (ahí tienen los casos de los restos de Sanjurjo, la laureada en el Parlamento o las calles con nombres franquistas en Tudela).

UPN se ha alejado del centro del damero político que tantos réditos le dio en el pasado. Profetizaban que la situación económica de una Navarra gobernada "por comunistas y nacionalistas" se iba a hundir. Pero no ha sido así y es por ello que han impulsado una guerra de banderas, con la cual pretenden recuperar el poder perdido con guiños estéticos o invocación al miedo. El último movimiento involutivo de UPN lo ha protagonizado el senador Pachi Yanguas, famoso por haber bendecido un Cuartel de la Guardia Civil en Fitero con la Asociación Española de Guardias Civiles posicionándose en contra. En senador se ha destapado: "En Navarra no hay riesgo inminente (de aplicarse el 155) pero a futuro sí (...) El Gobierno de Navarra no ha adoptado ninguna decisión en ese sentido, pero algo se está moviendo, sí hay alguna iniciativa de EH Bildu".

María Chivite condenaba ayer las palabras de Beltrán: "Más le valía al PP dedicarse a defender el autogobierno de Navarra en lugar de hacer afirmaciones que solo buscan crear alarma y que dejan a la vista que el PP se siente más cómodo en políticas recentralizadoras que en el autogobierno, y no digamos ya que en el federalismo que defendemos los socialistas". Y a la líder socialista le "gustaría saber si UPN comparte las afirmaciones de su socio, el PP". Como ven, sí que la comparte. Y lo hacen por las irresponsables palabras de Yanguas, que disfruta de su minuto de gloria mientras se equivoca por 5 motivos:

1- UPN ha demostrado que no sabe perder en las urnas y que está dispuesto a recuperar el poder por la fuerza, aun siendo consciente que desde el Gobierno de Navarra no se ha tomado ni una sola medida en favor de la independencia. Y no lo tendría a priori complicado, porque  Navarra no es Catalunya y nuestro Gobierno foral podría aplicar gracias a la Constitución la disposición transitoria cuarta que nos llevaría a un referéndum sin que Madrid pudiera decir ni mú.

2- UPN evidencia que su guiño "navarrísimos" no deja de ser producto del marketing, ya que los regionalistas eligieron hace tiempo: prefieren a su socio madrileño, el PP, que defender a Navarra con su autogobierno.

3- UPN se aleja de la centralidad política que tanto buscaron hombres como Juan Cruz Alli.

4- UPN debe reprobar las desafortunadas palabras de Yanguas de inmediato porque le han colocado en una situación geográfica en el mapa mundi político foral demasiado incómoda.

5- UPN se coloca una vez más junto a formaciones extremistas, tal y como hicieron en la manifestación del 4-J, donde se les vio junto a partidos madrileños a los que les importa poco o nada nuestra bandera, VOX o Ciudadanos.