Comptos constata que UPN dejó Navarra en riesgo de insolvencia





Navarra cerró 2015, el último presupuesto elaborado por UPN, con un incremento “relevante” del importe negativo del remanente de tesorería para gastos generales, que pasó de 184,1 a 238,1 millones. 54 millones de aumento del valor negativo, lo que a juicio de la Cámara de Comptos “puede generar tensiones de liquidez y de solvencia a corto plazo en la Hacienda Foral” y que se manifiesta, entre otros aspectos, “en que los fondos líquidos de tesorería se han reducido en 104 millones”.

Es la conclusión a la que llega la órgano fiscalizador tras analizar las Cuentas Generales de Navarra de 2015, y en la que constata además el elevado incremento de la deuda desde 2008. Lo que viene a justificar la necesidad de medidas financieras adicionales, como la reforma fiscal aprobada a principios de 2016.

En lo que se refiere al remanente de tesorería, los 238 millones de saldo negativo supusieron un repunte del 29% respecto al año anterior (184 millones), y una cifra similar a la de los ejercicios de 2013 (221 millones) y 2012 (239 millones). En todos esos años hubo que financiar con cargo al ejercicio siguiente compromisos generados en el año en curso. “Desde el inicio de la crisis económica esta magnitud es negativa, lo que pone de relieve un déficit real de tesorería que implica que los gastos de un ejercicio son financiados con recursos del siguiente”, subraya Comptos, que destaca además que la Ley Foral de Hacienda no contempla mecanismos legales para solventar esta situación de remanentes negativos, por lo que insta al Ejecutivo foral a “regular o adoptar las medidas precisas para financiarlo”.

El análisis elaborado por la Cámara de Comptos apunta además al alto endeudamiento de la Comunidad, así como a los numerosos costes fijos, como riesgos futuros para el equilibrio presupuestario. Cuestiones que en similares términos venían recogidos en informes anteriores, pero que se constatan con mayor nitidez en el año en el que se produjo el relevo institucional. El presupuesto de 2015 fue el último elaborado por UPN, y heredado por el actual Ejecutivo foral en sus últimos meses.

PRORROGA DEL PRESUPUESTO En su análisis, Comptos cuestiona las tres prórrogas presupuestarias consecutivas del Gobierno de UPN, que no logró sumar mayoría parlamentaria para las cuentas públicas de 2013, 2014 y 2015. “En la actual situación económica, la prórroga de un presupuesto durante tres ejercicios consecutivos dificulta una adecuada planificación económico financiera de la actividad del Gobierno de Navarra”, apunta el órgano fiscalizador, que sin embargo fija el alto endeudamiento como uno de los problemas principales de la estabilidad económica de la Comunidad Foral.

“La situación financiera del Gobierno de Navarra se sigue caracterizando por la necesidad de acudir a la financiación externa para cubrir sus gastos ordinarios y para hacer frente a los vencimientos de anteriores pasivos financieros. Este mayor endeudamiento está provocando un incremento de los recursos destinados a financiar la carga financiera derivada del mismo”, señala Compos, que a 31 de diciembre de 2015 fija la deuda en 2.898,8 millones, de ellos 2.549 millones a largo plazo y 349,8 a corto plazo. La deuda representa así el 88% de los ingresos corrientes del ejercicio. Sobre el volumen de 2014 se incrementó en 139 millones, un 5%.La Cámara también apunta al incumplimiento del objetivo del déficit de 270 millones, 120 más que en 2014 y por encima del 0,7% del PIB fijado. Un desvío motivado fundamentalmente por una aportación al Estado adicional de 43 millones por los ejercicios de 2013 y 2014; 21 millones de cobros por el TAV no efectuados por el Ministerio de Fomento, y 47 millones por la regularización de la deuda de Osasuna.

Por todo ello, y como ya había avisado en informes anteriores, la Cámara de Comptos destaca que la situación económico-financiera del Gobierno de Navarra requería en el momento del cambio de mandato de “una revisión sistemática de sus gastos e ingresos y una redefinición de sus propios objetivos al objeto de identificar las áreas de gestión prioritarias para hacer frente al actual contexto económico-social”.

Además, apuesta por “abrir una reflexión sobre la adecuación del marco presupuestario regulado en la Ley Foral de la Hacienda Pública de Navarra a las exigencias derivadas de la normativa europea y estatal de estabilidad presupuestaria”. “En este sentido, sería conveniente analizar si los actuales modelos de gestión y de control así como el propio contenido del presupuesto y de la cuenta general se adecuan a dichas exigencias”, señala.

Vía: Noticias