Pedro Pérez Bozal
Unas 140 personas se concentraron este jueves en la Plaza de los Fueros de Tudela contra del decreto navarro del euskera. Iñaki Bakero (AEK) y Ainhoa Reparaz (Argia Ikastola) leyeron el comunicado principal del acto.
"Hoy estamos aquí porque el actual Gobierno de Navarra propone un Decreto que ataca claramente al euskera y a nuestros derechos como personas navarras y riberas. Plantea medidas más restrictivas que las que regían con Gobiernos más beligerantes con el euskera", explicaron.
El comunicado decía que en un momento en el que gran parte de la sociedad navarra "pide más protección y ayudas para nuestra lengua, en estos momentos en los que el euskera necesita políticas valientes dirigidas a potenciar su uso y conocimiento, nos encontramos con una propuesta que parece buscar mas su desaparición que su fortalecimiento. Es un claro retroceso, una burla a nuestra lengua y al trabajo que todos y todas nosotras realizamos día a día en favor de ella. Menosprecia nuestra lengua y a nosotras y nosotros".
Bakero y Reparaz dicen que el decreto "dice que en la Ribera mientras lenguas como el ingles, francés o alemán serán tenidas en cuenta, una lengua de Navarra, el euskera, no. El euskera en la Ribera, cero.
Nos dice que no podemos usar el euskera en la administración ya que no habrá nadie que nos pueda atender en nuestra lengua, la de todos y todas las navarras. Nos obliga, nos impone, a todos y todas las riberas a expresarnos exclusivamente en castellano. ¿Qué pasa con todas las personas riberas que también queremos hacer uso del euskera? ¿Dónde están nuestros derechos?".
Ambos aseguraron que "este atropello es posible porque existe una ley del euskera totalmente caduca, que divide Navarra y a su ciudadanía. Denomina la Ribera como zona no vascofona y nos deja sin los derechos que por ejemplo pueden tener en Tafalla, Iruñea o Elizondo. Este borrador de Decreto supone legitimar esa ley y sus consecuencias totalmente injustas para todas los y las riberas. Supone mantener las desigualdades entre navarros dependiendo del lugar de residencia. Dibuja una Navarra dividida en la que todos salimos perdiendo, el euskera y la Ribera, sobre todo".
Es por ello que piden "a todas las formaciones políticas de La Ribera que acuerden y pongan en marcha políticas en favor de nuestra lengua, teniendo como objetivo su normalización. Que aparquen intereses partidistas y se pongan en serio a trabajar en favor del euskera. Que no consientan y denuncien cualquier ataque al euskera, pues ir contra el euskera es ir contra Navarra".
La Ribera, aseguraron, "necesita un movimiento en favor del euskera fuerte y amplio, que de respuestas a estas problemáticas y cree conciencia en favor de nuestra lengua. En este sentido, hacemos un llamamiento a todos los grupos culturales, deportivos, sociales... y en definitiva a todas las personas de la Ribera preocupadas, sensibilizadas, a sumar esfuerzos. Aprovechamos para hacer nuestra la declaración de Cortes y apoyamos e impulsamos la iniciativa Hordago! Esta es una partida que tenemos que jugar todas y todos y entre todas la vamos a ganar".
Voces sindicales
Oskar Rodríguez (ELA) y Tere Rosano (LAB) aseguraron por su parte que "el Gobierno habla de igualdad y no discriminación. Sin embargo, hace lo contrario: destierra una lengua propia mientras se abraza y prioriza a lenguas ajenas. En educación impusieron el PAI para restar la elección en modelo D, eliminaron la lista única en las oposiciones de profesorado con el argumento de que discriminaba a quienes no saben euskera, y ahora vemos como el gobierno navarro ha decidido imponer el inglés como requisito, una auténtica discriminación que ni siquiera tiene encaje legal".
"Inventan decretos y leyes que no hacen sino ahogar el euskera, especialmente en nuestra zona, En las administraciones de nuestra zona no se valora ni para un solo puesto de trabajo, ni muchos menos se exige como requisito", añadieron.
El borrador, afirmaron, "tampoco ha tenido en cuenta nuestras aportaciones al decreto para que toda la ciudadanía navarra esté en las mismas condiciones en derechos lingüísticos, demostrando así su nula voluntad de mejorar esta ley y de no discriminar tanto a los vascoparlantes como a los que quieren serlo".
Ambos sindicalistas pidieron el fin de la zonificación y aseguraron que LAB, ELA y Steilas salen a la calle "porque tenemos que cambiar las políticas que menosprecian a la ciudadanía y que garantizar los derechos lingüísticos por igual para todos los navarros y navarras".
Txoli Hernández, desde el ámbito de la cultura, aseguró por su parte que "el euskera es nuestra lengua, es parte de nuestra cultura y por ello reivindicamos que se reconozca como tal y se le otorgue el lugar que le corresponde, ya sea en la calle, asociaciones, instituciones, formando parte de nuestras vidas, en el día a día".
Y Ander Alfaro, del movimiento juvenil, añadió que el borrador vuelve "a subestimar el euskera, el euskera es de todos y tenemos todo el derecho de hablar euskera en el trabajo. ¡El euskera es para todos".