El Instituto Navarro de la Memoria del Gobierno de Navarra, en colaboración con el equipo técnico de la Sociedad de Ciencias Aranzadi, ha exhumado este fin de semana los restos de dos personas inhumadas en el cementerio de Sigüés (Zaragoza). Los testimonios recabados apuntan a que se trataría de Vicente Abadía Anaut, natural de Isaba, y un compañero suyo de identidad desconocida, ambos combatientes antifranquistas que, según las fuentes oficiales de la época, fallecieron ahogados en el río Aragón.
Al parecer, Vicente Abadía y su compañero eran miembros del Partido Comunista de España y realizaban labores de traslado de fondos del Socorro Rojo Internacional. En una de estas operaciones, en el mes de abril de 1948, al observar un control de la Guardia Civil, intentaron evitarlo vadeando el río donde resultaron ahogados.
La exhumación de Vicente y su compañero, si se confirma tras el cotejo de las muestras con el ADN de sus familiares, se enmarca en el inicio de las conversaciones llevadas a cabo con la Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón con el fin de suscribir un convenio de colaboración en materia de memoria democrática. En este sentido, la investigación sobre personas desaparecidas y la posibilidad de colaborar en labores de exhumación podrían ser algunos de los ámbitos que se contemplarían en dicho convenio.
Ésta ha sido la última exhumación que se va a desarrollar este año 2020 en el marco del Programa de Exhumaciones por parte del Instituto Navarro de la Memoria, que ha permitido la recuperación de los restos de 115 personas desde que se inició en el año 2015.
Combatiente antifranquista
Vicente Abadía Anaut nació en Isaba en 1913. Durante el periodo republicano intentó fundar la UGT y tras el golpe de estado militar huyó a Francia. Volvió a Barcelona e ingresó en las Juventudes Socialistas. En 1939, con el fin de la guerra, acabó en el campo de concentración de Argèles-sur-Mer. Posteriormente, trabajó de enlace con el campo de Gurs (llevando libros, tabaco, buscando madrinas…). Fue detenido y llevado a varios campos de concentración y a un batallón de trabajadores. Consiguió huir, también de los alemanes, tras lo cual ingresó en la Resistencia, participando en la liberación de Mauleón, Tarbes y Montory.
Durante sus últimos años actuó como enlace, hasta que falleció en 1948 a los 35 años. En ese momento portaba documentación falsa a nombre de Juan González Martínez. Los vecinos de Sigüés lo reconocieron, pero no lo identificaron para no poner en riesgo a sus familiares, vecinos de Isaba. Según la Guardia Civil, la causa de su muerte fue por “hemorragia”. Sin acabar el mes, fue hallado otro hombre en el río Aragón; su nombre, Antonio Gil Rodríguez, probablemente también falso y compañero de Vicente.