La dirección de Uvesa acepta los deseos del Gobierno de Navarra








La dirección de Uvesa regateó durante semanas a sindicatos como Comisiones Obreras o ELA, que exigían que se tomasen las medidas sanitarias pertinentes o pedían que se realizasen test PCR de forma masiva a la plantilla (hipótesis que inquietaba a algunos directivos, que veían con temor la interrupción de la actividad empresarial).

La cúpula empresarial se negó en redondo y este hecho conllevó que tomase cartas en el asunto el Gobierno de Navarra, que conoce de cerca a Uvesa porque el año pasado les tuvieron que 'forzar' a regularizar la situación de medio millar de empleados (que ejercieron durante décadas, a instancias de la empresa, de falsos autónomos).

El Gobierno foral `obligó' a la realización de test masivos y, una vez constatado que al menos 176 trabajadores de Uvesa están infectados por COVID19, ha instado a la compañía a cerrar su planta en Tudela para evitar males mayores.

"Cautelar y preventiva"

Una reunión celebrada ayer entre el director general de Salud, Carlos Artuondo, y el presidente del consejo de administración del Grupo Uvesa, Antonio Sánchez, acabó con acuerdo entre Gobierno foral y empresa para cerrar la misma de forma "cautelar y preventiva".

Explica Gobierno de Navarra que entre las medidas acordadas entre Salud y la empresa de procesado de aves se encuentra la realización de pruebas PCR  a toda la plantilla (713 empleados), la realización de una desinfección de las instalaciones de Tudela y el diseño de un protocolo relacionado con transporte, entradas y salidas de la planta, uso de espacios comunes o puestos de producción.

Seguridad... también a nivel laboral

Txomin González preguntó a la consejera de Salud sobre la seguridad en el trabajo. El diputado ribero de Euskal Herria Bildu recordó que "se ha incidido mucho en que la mayoría de los contagios eran en momentos de ocio, pero con el brote de Uvesa se ha visto que el entorno laboral es un riesgo para la salud".