Esta Navidad no compres: ¡adopta!







Vía: Diario Información

Con la Navidad llegan las cartas a Papá Noel y a los Reyes Magos en las que los más pequeños muestran sus deseos por tener ciertos regalos bajo el árbol. «Este año me he portado muy bien, quiero tener un perrito»; «me gustaría que me trajeras un gatito negro»; «le voy a pedir a Papá Noel un hamster», estas frases pueden leerse en dichas cartas y a veces, no todos los padres saben lidiar con ellas.

¿Comprar o adoptar? Esa es la cuestión principal, quizá conociendo unas premisas sea más fácil dar respuesta a este dilema. Las cifras de abandonos en España son escandalosas, y cada vez van en aumento. Se trata de tomar medidas pero no todo el mundo las cumple. El año pasado un total de 104.688 perros y 33.719 gatos fueron abandonados en España. Sin contar los animales exóticos que, a veces no tienen cabida en los refugios, al ser animales más delicados. Es el caso de aves, reptiles o roedores.

Cachorro o adulto Ya se compre o se adopte una mascota, se trata de una decisión muy importante, y hay que ser muy consciente de que un nuevo miembro va a formar parte del núcleo familiar, con todo lo que conlleva. Pero también se empieza una etapa maravillosa, con un nuevo compañero o compañera con el que construir un vínculo de amor y amistad que durará para toda la vida. Muchos creen que la mejor opción sería comprar un perro «nuevo», un cachorro, que tuviera su certificado de autenticidad de raza, el cuadro de vacunas completas y otras garantías que ofrecen las tiendas de mascotas.

Pero no son objetos inanimados sin sentimientos ni juguetes para divertirse un rato y luego ser entregados al olvido, son seres vivos con derechos que deben ser respetados y tratados con toda la consideración posible. El vínculo con un animal no entiende ni de razas ni edad, no se crea únicamente con un cachorro. Se puede construir con cualquier animal al que uno decida cuidar y demostrar todo el amor del mundo. Siempre se dice que el amor que muestra una mascota es incondicional, y es verdad. Ellos no conocerán más que lo que su dueño les da y cómo les trate, y siempre serán agradecidos.

Adoptar cambia la vida de muchos. No sólo a la mascota que tiene una segunda oportunidad de vivir en un hogar. Sino de la persona o personas que la adoptan y también de otra mascota abandonada o callejera que ocupará el lugar libre que deja el animal adaptado. A día de hoy, todavía muchos siguen creyendo que un perro de raza es mejor que uno mestizo, y no es cierto. Las mezclas hacen que las nuevas generaciones vengan con más fortalezas y mejor adaptación a las enfermedades propias de los animales, esto hace que la expectativa de vida de los perros de diversas razas sea mayor.

Aún así, muy pocos saben que los albergues, protectoras y perreras están llenos de perros de raza, si eso es lo que uno quiere. Y ya entrando en tema económico, adoptar es mucho más barato que comprar un animal en una tienda. Si son razones suficientes, en tu cuidad habrá una o varias asociaciones con las que contactar para adoptar. No hay mejor regalo que salvar la vida a un animal.

Consejos de adaptación

1- Adoptar cuando se tenga más tiempo libre para su adaptación: En vacaciones o en semanas con menos horas de trabajo es perfecto. Para estar más tiempo con el animal y no dejarle solo en un entorno nuevo para el.

2- No forzar acercamientos, terminará siendo tu amigo, pero dale tiempo: Hay que preocuparse de que no tenga miedo. No abrazarle ni achucharle, ni castigarle... puede que venga de un hogar donde no le trataban bien.

3- Ayudar al niño a entender que no es un juguete y que necesita espacio: Es importante que el niño no se encapriche con la mascota y la trate como un juguete. Los primeros meses hay que tener una supervisión máxima.

4- Controlar mucho si hay otra mascota en casa, no viene a quitarle el sitio: Lo ideal es que se conozcan fuera de casa, en lugares abiertos. Que se huelan antes de encontrarse en la casa. Cuando llegue evitar los objetos por los que puedan discutir: comida, juguetes... con paciencia.

5- Las rutinas son las mejores aliadas para una adaptación buena: Tener su sitio de la comida y la bebida, su caja en el caso de gatos, su lugar para dormir, horarios fijos a la hora de las salidas o de jugar con el, ayudarán a la adaptación de la nueva mascota en casa.