Emilio Majuelo analizó la disolución de la sociedad civil tudelana en 1936











“La disolución de la sociedad civil tudelana a partir de julio de 1936 ha marcado durante décadas a Tudela. El legado de aquel periodo no ha podido ser más mísero. Hundió la vida de una generación y afectó grandemente a las siguientes durante muchos años. Tudela se convirtió en la ciudad triste, roma, olvidadiza y sumisa que durante tantos años hemos conocido”. De esta forma resumió el historiador y doctor en Historia Contemporánea de la UPNA, Emilio Majuelo, cómo quedó Tudela tras el golpe de Estado y la Guerra Civil dentro del ciclo de conferencias que acompañan a la exposición Tudela 1936-1939. Sus protagonistas que permanece abierta en la Casa del Reloj hasta el 27 de enero.

Majuelo llamó la atención sobre “el enorme tejido asociativo” que existía en la capital de la Ribera con cientos de personas afiliadas Izquierda Republicana, otros tanto en UGT y cientos integrados en el Tradicionalismo. “La movilización política era muy fuerte y no es de extrañar el peso de las organizaciones de la izquierda. Había una tradición de carácter liberal demócrata que luego se perdió”. En su intervención indicó que la Ribera era “lo más parecido a Andalucía con 20 de los 27 mayores propietarios de Navarra que tenían 2l 25% del regadío y el 35% del secano.

REPRESIÓN El historiador (en la conferencia que llevaba por título Tudela en vísperas del golpe de estado de 1936) destacó que tras el fracaso inicial del golpe de Estado llevado a cabo por Mola, Sanjurjo, Franco y otros generales “se abrió la posibilidad de volver a los cuarteles pero apostaron por iniciar la Guerra Civil. Sus familias tenían incluso billetes para huir de España, pero era un momento de una gran responsabilidad y optaron por la guerra. Lo que estaba en juego en España en 1936 no era Fascismo o Revolución, sino Fascismo o Democracia. La revolución había sido descartada muchos años antes por la III Internacional”.

En su conferencia destacó que Mola “sabía perfectamente que a la manera del fascismo italiano no se hubiera hecho con el poder. El ejército controló todo y ni Falange, ni el Carlismo, ni la Guardia Civil se movía por su cuenta. Mola y Franco sabían que sin violencia no tenían ninguna posibilidad. Sin represión no había forma de reimponer el capitalismo que había entrado en crisis, ni ese españolismo centralista, militarista y machista que se impuso. Fue una política terrorista de violencia extrema”.

Recordó que hay documentados 16.000 casos de represaliados en Navarra dentro del Fondo Documental de Memoria Histórica. “Más de 3.000 asesinados, 400 murieron en cautividad, represaliados económicamente, violencia de género, sanciones, exilio... Sorprende hasta dónde llegó la represión en Navarra”. Respecto a Tudela indicó que “se produjo un corte tremendo en una Navarra uy en una Tudela donde no había habido conflictos laborales, ni acciones anticlericales ni violencia callejera”. Citando al libro de Antonio Lizarza señaló que en la Merindad de Tudela había en marzo de 1935 126 patrullas, lo que significaban 760 hombres, de “boinas rojas” “dispuestos a salir. “Corella era donde había más patrullas, 21 y 13 en Tudela”.

CONFERENCIAS

l 13 de enero. Fernando Mikelarena, historiador y profesor de la Escuela Universitaria de Huesca, premiado recientemente con el Premio Euskadi en la modalidad de ensayo en castellano por su obra ‘Sin piedad’ disertará sobre ‘La limpieza política de 1936-1937 en Tudela y la Ribera Tudelana’. La charla tendrá lugar en Castel Ruiz a las 19.30 horas.

l 20 de enero. Francisco Etxeberria, profesor de Medicina Legal y Forense de la UPV, director de un grupo de trabajo de Aranzadi sobre desaparecidos y fosas comunes de la Guerra Civil ofrecerá una charla en el centro cívicio Lourdes a las 19.30 horas.

l 27 de enero. José Miguel Gastón, doctor en Historia y jefe de la sección de Memoria Histórica del Gobierno foral hablará sobre ‘Balance y futuro de la Memoria Histórica en Navarra’. Centro Cívicio Lourdes 19.30 horas.

Fermín Pérez Nievas, Noticias de Navarra