Ecologistas denuncian el lamentable estado del río Alhama





Ecologistas en Acción denuncia el “lamentable estado ecológico” en el que se encuentra el río Alhama en La Rioja y en Navarra, especialmente en su tramo medio y bajo. Según la organización, el río carece de un caudal ecológico correcto que permita desarrollarse a las importantes especies que alberga, como el visón europeo.

El río está sobreexplotado con innumerables azudes que retraen el agua para riego, y soporta la contaminación de los cuantiosos vertidos de aguas residuales, de origen tanto agrícola como urbano, que provocan mortalidad de peces de forma periódica. La organización ecologista también denuncia la inacción de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y de los Departamentos de Medio Ambiente de los gobiernos de La Rioja y Navarra.

Las denuncias vecinales recibidas por Ecologistas en Acción recalcan que, debido a la abusiva extracción de agua, algunos tramos del río “desaparecen prácticamente”. Algunos de los azudes empleados serían incluso ilegales.

El río Alhama constituye un corredor verde de gran importancia. En él habitan especies de fauna protegidas y amenazadas, como la nutria paleártica y el visón europeo. Este último es una especie protegida a nivel nacional e internacional, catalogada “en peligro crítico de extinción” en la Lista Roja de Especies Amenazadas (UICN), en peligro de extinción en La Rioja y Navarra, y en peligro crítico en España.

Ecologistas en Acción denuncia el uso que hacen los sindicatos de riego del agua del río Alhama, donde no hay ningún tipo de control por parte de la CHE, incumpliendo el Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Ebro. Este plan establece que:

“El régimen de caudales ecológicos ha de permitir mantener de forma sostenible la funcionalidad y estructura de los ecosistemas acuáticos y de los ecosistemas terrestres asociados… proporcionando condiciones de hábitat adecuadas para satisfacer las necesidades de las diferentes comunidades biológicas…”

La organización también señala que no existe un sistema de medida o aforo en los azudes que permita comprobar si se cumple el caudal ecológico, como exige la normativa. Tampoco se estaría cumpliendo la Ley de Aguas (RDL 1/2001), que busca promover la vida piscícola y la vegetación de ribera.

Otras alteraciones incluyen la inexistencia de escalas para peces, la gran altura de los muros de los azudes, la excesiva compartimentación del río y la presencia de especies invasoras como el mejillón cebra y el visón americano, así como especies alóctonas como la caña, que llegan a casi taponar el cauce.

Ecologistas en Acción exige que la CHE y los gobiernos de La Rioja y Navarra tomen medidas urgentes para frenar los efectos nocivos sobre el medio ambiente y garantizar el cumplimiento de la normativa vigente.