"Castejón se suma a la Declaración de Cortes Con esta comparecencia queremos mostrar nuestra adhesión a la Declaración de Cortes que exige la superación de la zonificación del euskera. En este mismo momento también se está realizando una comparecencia paralela en Irunberri para expresar la misma adhesión de la ciudadanía a la Declaración de Cortes.
Como ciudadanos y ciudadanas de Navarra, al igual que poco a poco están haciendo desde más pueblos, desde Castejón queremos lanzar un órdago, un envite, que vaya de punta a punta y recorra todos los lugares, pueblos, concejos, villas y ciudades de la Comunidad Foral. Un órdago que proclame a los cuatro vientos, que aquí y ahora queremos avanzar para remover todos aquellos obstáculos que impidan que cualquier navarro o navarra pueda poner en práctica su derecho a conocer y usar el euskera en la totalidad del territorio foral, independientemente del lugar donde se encuentre o habite.
Y en la actualidad un obstáculo que cercena nuestros derechos es la zonificación lingüística del territorio navarro en tres zonas: la “vascófona”, la “mixta” y la “no vascófona”. Zonificación que si bien ya era injusta cuando se impuso, hoy, casi cuatro décadas después de su entrada en vigor, también resulta anacrónica.
Desde Castejón echamos un órdago a grande. Porque grandes son los valores que deseamos prevalezcan en nuestra tierra. Una tierra, Navarra, en la que impere la justicia, es decir, en la que no haya discriminación de ningún tipo, tampoco por motivos lingüísticos. Y la existencia de la zonificación es una fuente de discriminación, de desigualdad y de desunión de las navarras y los navarros.
Una tierra en la que todos y todas seamos iguales, tanto en deberes como en derechos; en la que no tengamos distintos derechos según el lugar de Navarra en el que nos encontremos en cada momento. Una tierra que impulse la cohesión de sus gentes; que no las divida por querer vivir en una lengua o en otra; que tenga en cuenta la diversidad de lenguas que posee; y que no vea esa diversidad como una amenaza sino como una riqueza.
Desde Castejón echamos un órdago a txikita. Junto al castellano, idioma gigante de millones de hablantes, convive en Navarra una lengua minoritaria y minorizada, cuyo conocimiento y uso nos hace, sin embargo, más grandes y nos obliga a preservarla y evitar su deterioro o su pérdida. La realidad sociolingüística que hoy conocemos, esa que tanto se invoca como justificación para imponer la zonificación, no es la misma que la que ha tenido Navarra a lo largo de la historia. Así mismo, el hecho de ser reducido el número actual de personas que conocen el euskera, no es legitimación para conculcar sus derechos.
Los derechos corresponden a todas las personas en todos los lugares. Por justicia exigimos que no se trate a las personas que quieren vivir en euskera como ciudadanos de segunda. Desde Castejón echamos un órdago a pares. Dos reyes tenemos en Navarra; dos idiomas. O dos reinas; dos lenguas. Pero no reinan ambas por igual. Ya que mientras una llega a todos y cada uno de los rincones de Navarra, la otra está amojonada y constreñida, limitada con muros burocráticos difíciles de rebasar. Y nosotros y nosotras, desde Castejón, reivindicamos que las dos lenguas sean consideradas y tratadas a la par; ni arriba ni abajo, a la par.
Por lo tanto, hoy también reivindicamos que el euskera es parte consustancial de la identidad navarra, parte de su ser y de sus gentes, y no es posible entender lo uno sin lo otro, Navarra sin el euskera, el euskera sin Navarra. Desde Castejón echamos un órdago a juego. Pensamos que tenemos buenas cartas, y las queremos poner en juego, para ganar el órdago, para ganar el futuro.
Futuro en el que no haya discriminación, ni segregación, ni conculcación de derechos. Futuro en el que los navarros y las navarras que quieran puedan vivir en euskera, trabajar en euskera, jugar en euskera, amar en euskera. Futuro en el que no se trocee el territorio ni la sociedad navarra, ni con el euskera ni con ningún otro motivo.
Por lo tanto, hoy, desde Castejón lanzamos un órdago a la zonificación del euskera en Navarra. Un órdago que debe ser atendido de una vez por las instituciones navarras, Así mismo, hacemos un llamamiento a las gentes de todos los municipios de Navarra, a todos los agentes sociales, culturales, deportivos, sindicales, económicos y políticos, para que se sumen y hagan suyo este llamamiento.
Los animamos a que difundan en su entorno esta petición y la completen desde su propio punto de vista y con sus propias peticiones. A su vez, los animamos a que se sumen a los actos y movilizaciones que se puedan desarrollar en los próximos meses con este objetivo. La superación de esta división lingüística del territorio navarro será un gran progreso para nuestra sociedad, un avance en la justicia social de Navarra, un avance en la unión y cohesión de nuestra tierra.
En definitiva, un avance para todas y todos".