Eneko Larrarte reparó hace unos días en ETB en la paradoja que supone que una ciudad como Tudela, que históricamente ha sido sinónimo de encuentro de distintas culturas, se haya convertido en granero de votos de una fuerza nativista como Vox.
El partido que lidera Santiago Abascal logró en las últimas generales de noviembre de 2019 un 12,85% del voto en la capital ribera que contrastaba con el bajo 5,61% que promedió en todos los municipios de Navarra.
Larrarte asegura que una de las claves del buen funcionamiento electoral de Vox en el sur de Navarra es la inacción de las administraciones públicas a la hora de incentivar la convivencia real de la población nativa y la población migrante.
El director general de Vivienda de Gobierno de Navarra afirma que la sociedad "ha utilizado la mano de obra barata" de la inmigración "y no ha trabajado "la integración en el ámbito escolar o los problemas de conocimiento del idioma".
Vox y "la invasión musulmana de España"
Poniendo palos en las ruedas de la integración estará Vox, que en su cuenta de Facebook de Tudela comparte mensajes delictivos que dicen que los ciudadanos españoles tienen que trabajar hasta los 70 años para alimentar "a toda la escoria de fuera".
Los ultraderechistas quizás se refieren a Juan Carlos de Borbón, nacido en Roma e instalado en la actualidad en Emiratos Árabes con la intención de invisibilizar la impunidad judicial que disfruta tras haber saqueado España, tal y como dictaminó su propio hijo cuando le quitó la asignación económica y anunció que no iba a aceptar su herencia.
Vox, que no cuenta con un solo concejal en Navarra, también decía el mes pasado en su cuenta de Facebook en Tudela que son el único partido que "se opone frontalmente a la invasión musulmana de España" y aseguraban que tienen intención de modelar la mentalidad a los migrantes: "El que quiera venir, tendrá que llegar debidamente autorizado, a aceptar nuestras costumbres, nuestras tradiciones y nuestra forma de organización y de vida".
La forma de vida de Santiago Abascal es de todos conocida: pose de emprendedor, veinte años en el pesebre político y aire regeneracionista a pesar de haber abrevado en los chiringuitos de Esperanza Aguirre.
Vox y el islam
La supuesta alergia de Abascal al islam no deja de ser llamativa porque Vox fue fundado en 2013 gracias a un donativo de un millón de euros que entregó una organización islámica y marxista, el Consejo Nacional de la Resistencia de Irán, que en el pasado cometió múltiples actos terroristas y en 2014 aportó 65.000 euros extra a Vox para pagar el sueldo durante ocho meses del propio Abascal y de Iván Espinosa de los Monteros, ayunos de ingresos por el fracaso del partido en las elecciones europeas de aquel año.