Tudela Comparte ha recordado a través de las redes sociales que se han cumplido cinco años de la reunión que ayudó a alumbrar Villa Javier. La fundación asegura que tuvo "la inmensa emoción de recibir a más de 100 personas que se interesaron por participar como voluntarias en un proyecto que nacía desde la sociedad civil".
"Fue la primera vez que convocamos a la ciudadanía para que tomara partido contra la pobreza, la desigualdad y la exclusión y la respuesta fue increíble. Después de esto, siempre hemos sentido el apoyo de Tudela y de toda la Ribera", aseguran.
Comedor social y otros proyectos
David Crespo, coordinador de Villa Javier, explicó hace unos meses a e-Ribera.com cómo se estructura este proyecto: "Tenemos un comedor social, que quizás sea lo más conocido. Este primer proyecto está pensando para las personas en riesgo de exclusión social que no tengan menores a su cargo".
Villa Javier alivia a personas en circunstancias de vulnerabilidad de cualquier ámbito: económico, psíquico o administrativo. Pero también es consciente de que los menores a cargo de estas personas no tienen que comer fuera de su ámbito familiar, y es por ello que se creó El Capacico.
"Los chiquillos, explicó Crespo, están mejor en su entorno familiar. Con sus padres y abuelos. Para ayudar a estas familias nosotros lanzamos El Capacico, que es una especie de autoservicio en el que les damos una serie de puntos que van en relación al número de personas del núcleo, su situación, si perciben ayudas, etc".
Tudela Comparte lanzó en enero de este año su última aventura, El Obrador, que es un proyecto de economía circular e inclusiva, cuyo objetivo general es crear un emprendimiento con liderazgo femenino para la inserción sociolaboral de personas desfavorecidas, convirtiendo de forma artesanal los excedentes locales agroalimentarios en productos alimenticios innovadores de alta calidad organoléptica y nutricional.