Javier Esparza ha anunciado la "redefinición" del proyecto Navarra Suma que él alumbró en 2019. La coalición conservadora, que integraba a los antifueristas de Ciudadanos y resucitaba el pacto entre UPN y el PP, contribuyó a que los regionalistas recuperasen poder municipal, ensanchasen su representación en el Parlamento y mantuvieran sus escaños en el Congreso.
Algunos medios están especulando con la posibilidad de que UPN recupere su marca a nivel electoral de cara a 2023, tal y como exigía Sergio Sayas e insinuaba Miguel Sanz. Pero lo que está claro es que los cambios electorales en el centro-derecha estatal influirán en la composición de la coalición.
Esparza, que en 2019 firmó pacto con Cs y ninguneó al PP, ahora tendría interés en que los 'populares', ya sin Ana Beltrán 'incomodándole' en el Parlamento, recuperen poder en la coalición a costa de los naranjas, casi desahuciados tras la hecatombe de las últimas elecciones madrileñas.
Los regionalistas, que cerrarán su proceso interno en otoño de 2022, podrían recuperar la marca electoral UPN e integrar a miembros del Partido Popular y Ciudadanos como independientes. Falta por ver si personas afines a Vox tendrían espacio en esta lista.
Palos al PSN-PSOE
Esparza cargó ayer contra el PSN-PSOE en el Iruña Park: "Un partido que es útil para el nacionalismo vasco no puede ser útil para Navarra, porque blanquear a EH Bildu y hacer más fuerte al nacionalismo y al independentismo vasco no es bueno para Navarra".
El líder de la oposición asegura que la presidenta María Chivite "eligió ese camino y hasta ahora ha despreciado todas nuestras propuestas, incluida la de aprobar los presupuestos generales de Navarra de este 2021, un año trascendental por la pandemia".
Mapa para recuperar el poder
UPN necesita recuperar a los guarismos de voto que obtuvo de la mano de Miguel Sanz en las autonómicas entre 1999 y 2007 (más del 42% del voto y entre 22 y 23 escaños). Cabe recordar que Navarra Suma logró en 2019 'tan solo' el 36% de los votos y 20 escaños.
La apuesta de Esparza es que Navarra Suma logre igual o más parlamentarios que PSN-PSOE, Geroa Bai y el espacio de Unidas Podemos, que en la actualidad suman 23 escaños. Si Na+ le birla un parlamentario socialista en la Ribera con la guerra liderada por Alejandro Toquero y alcanza los 21 en 2023, y Geroa Bai pierde un escaño en favor de EH Bildu (que perdió su octavo parlamentario en 2019 por escasos votos), el bloque que apuntala al Gobierno de María Chivite se conformaría con 21.
Y este 'empate' podría facilitar que Ferraz, la vieja guardia del PSN, la UGT y la prensa madrileña consigan que Chivite rechace liderar el Gobierno de Navarra si su silla, esta vez sí, dependiese de un voto favorable de Euskal Herria Bildu con el que el PSOE no hace ascos en Madrid.