Un grupo de estudiantes le recuerda a Iglesias su colección de traiciones





La vomitiva deriva socialdemócrata de Pablo Iglesias, que ahora elimina topes salariales y límites anuales para forrarse y eternizarse dentro de Podemos, ha tenido hoy un acto de justicia poética: el flamante vicepresidente, ayer tan rojo y hoy tan rosa, ha sido increpado y escracheado por un grupo de estudiantes cuando iba a hablar de fascismo en la Complutense. 

Al grito de "¡fuera vendeobreros en la Universidad!" Iglesias ha sido acusado por varios miembros del Frente Obrero de venderse "al capitalismo". Se preveía lluvia de palos al aplaudidor de Felipe VI, al nuevo amigo de doña Letizia, al reformista que se traga sapos mayúsculos de la mafia socialista (Nadia Calviño y Grande Marlaska), al endogámico que enchufa a su mujer, y al se negó a firmar un acuerdo programático porque quería revolucionar el Gobierno desde dentro. Ya...

Ahora ha tomado 'jarabe democrático' (práctica inoportuna cuando se la hicieron a Rosa Díez y también ahora). Es evidente que Iglesias se ha atrincherado junto a su cuadrilla y ha olvidado todas las reivindicaciones del 15-M. Ahora reparte lecciones contra otro impresentable, Garzón, que si tuviese un mínimo de decencia se largaría tras regular el juego en favor de la mafia que lo controla.