'Parásitos': lucha de clases en tiempos del yo






La historia de todas las sociedades que han existido hasta nuestros días es la historia de las luchas de clases. Hombres libres y esclavos, patricios y plebeyos, señores y siervos, maestros y oficiales, en una palabra: opresores y oprimidos se enfrentaron siempre, mantuvieron una lucha constante, velada unas veces y otras franca y abierta; lucha que terminó siempre con la transformación revolucionaria de toda la sociedad o el hundimiento de las clases beligerantes".

Así comienzan Marx y Engels el 'Manifiesto comunista'. Y así podría haber comenzado 'Parásitos', joya deliciosa de Bong Joon-ho que esta pasada madrugada ha arrasado en los Oscar tras llevarse el premio a mejor película (hecho insólito para una película de habla no inglesa). 'Parásitos', al igual que 'Joker', ha puesto el dedo en la yaga: la lucha de clases, en realidad conflicto único universal.

'Parásitos'

Una familia que sobrevive en un semisótano logra ser contratada en una mansión. Y lo que sucederá a continuación te sorprenderá. No es extraño que 'Parásitos' haya visto la luz en un país emergente mientras Europa se mira al ombligo con Almodóvar como máximo exponente. 

Al cineasta manchego no se le puede regatear ni un ápice su creatividad, harina de otro costal es su compromiso artístico. Y es normal que quiera una gira de homenaje mostrándonos que echa de menos a su madre y la juventud perdida. Pero un film como 'Dolor y gloria' no podrá competir nunca con 'Parásitos', que quizás sea la mejor película de la última década.