Montes comunales son los de Cierzo y Argenzón,
comprados a la corona por una buena razón,
que fue dar trabajo y pan a toda la población,
cosa que ya no recuerda la nueva administración
dejando venir a menos, con una mala gestión.
Tras de mucho discutir, estos fueron repartidos
entre siete congozantes, que no estaban muy unidos,
después de poner las mugas no se acabó la cuestión,
los del pueblo de Fitero montaron un buen follón,
dicen que les dan de menos en esta repartición.
Han apelado a Tudela que es el quid de la cuestión
pero el señor juez les dice que no llevan la razón,
que todo se ha repartido por orden y proporción,
y en este asunto no cabe recurso de apelación.
De la fecha del reparto mucho tiempo ha transcurrido,
y la Ciudad de Corella, por la codicia de algunos, y la desidia de muchos
su comunal ha perdido, aunque no es del todo cierto,
nunca existió documento del comunal desafecto,
y si la ley es la ley y requiere este concepto
los montes que nos ocupan, son y serán comunal para todos los efectos
pues igual que el de Tudela, salieron del mismo cesto
como queda reflejado en planos y documentos,
aunque no lo quieran ver Gobierno y Ayuntamiento.
EUGENIO ALDUÁN OTXOA
Enero 2008