Esparza tuvo la ikurriña en el Ayuntamiento durante más de cuatro años siendo alcalde de Aoiz











Javier Esparza tuvo la ikurriña junto a los símbolos oficiales del Ayuntamiento de Aoiz, tanto en el salón de plenos como en la fachada del Consistorio, durante más de cuatro años como alcalde. Desde su elección como primer edil en mayo de 1999 y la retirada de la enseña en diciembre de 2003 tras la aprobación de la Ley de Símbolos, la bandera ondeo con total normalidad en el Consistorio, donde fue colocada en 1977 tras un referéndum en el que los vecinos de la localidad se mostraron mayoritariamente a favor de que se incorporara al balcón. La ikurriña incluso estuvo presente en las fiestas de agosto de 2003, con la actual Ley de Símbolos en vigor desde abril.

Aoiz fue, después de Baztan, el segundo municipio de Navarra en acompañar a sus símbolos oficiales con la bandera tricolor. Lo hizo en plena transición y tras una consulta a los vecinos que ampliamente se posicionó favorablemente. Ante las dudas de quién oficializaba la decisión popular, fue el propio alcalde Miguel Ángel León, que luego sería parlamentario de UPN, quien decidió asumir una responsabilidad que en aquellos años no resultaba fácil, y que finalmente se llevó a cabo sin ninguna consecuencia política ni penal.

La ikurriña se mantuvo durante los años posteriores con corporaciones de distinto color político. También con los independientes ideológicamente cercanos a UPN, entre los que se encontraba el hoy presidente regionalista, Javier Esparza. Tanto en su etapa de concejal (1995-1999) como de alcalde (1999-2003), la bandera formó parte del mobiliario consistorial, como atestiguan múltiples imágenes de aquellos años.

Posteriormente fue el propio Esparza quien, siguiendo lo fijado por la Ley de Símbolos y tras un requerimiento del Gobierno de UPN, decidió retirar la enseña del Ayuntamiento. Lo hizo en diciembre de 2003, ocho meses después de la aprobación de la polémica norma y una vez superados los comicios municipales que le permitieron renovar por otros cuatro años la Alcaldía. Esparza justificó el cambio en la necesidad de acatar la nueva ley, que fijaba sanciones para los regidores que incumplieran la norma. No obstante, la decisión fue controvertida y criticada por una parte de los vecinos, que ante la negativa a izar la ikurriña en las fiestas de 2004 y las condiciones fijadas a algunos grupos culturales para recibir subvención, optaron por celebrar un chupinazo alternativo.

Trece años después, Esparza es presidente de UPN y un Gobierno alternativo se dispone a derogar la polémica ley. La ikurriña se ha convertido así nuevamente en elemento de confrontación política, en especial para el exalcalde de Aoiz, que ha convertido la reforma en un elemento central de su discurso. “Es algo prioritario”, señalaba hace escasas fechas.

ARGUMENTO POLÍTICO Prácticamente desde el inicio de la legislatura Esparza ha fijado el foco del debate en la posibilidad de que los ayuntamientos puedan poner la ikurriña si así lo deciden en sus respectivos plenos. Un hecho contra el que ha arremetido con especial dureza, y del que hace responsable a la presidenta Uxue Barkos, ha quien ha acusado de “ultrajar” la bandera de Navarra, de “imponer” la ikurriña, de “ofender” a la mayoría de los navarros o de “despreciar y menospreciar nuestros símbolos”. “No les importa excluir a la mayoría, pisoteando los símbolos propios de Navarra y nuestra realidad institucional” denunciaba ya el pasado año el líder de UPN ante la posibilidad de que algunos Ayuntamientos puedan mostrar la bandera como hiceran muchas localidades navarras hasta 2003, incluido Aoiz con él siendo alcalde entre 1999 y 2013. “Es un desprecio y una deslealtad hacia la mayoría de los ciudadanos de Navarra”, argumenta ahora Esparza.

Vía: Noticias