Villafranca acogió la fiesta del euskera





Un grupo de vecinos de Villafranca decidieron hace tres años dar naturalidad al euskera en la Ribera porque “es un patrimonio vivo navarro”. Así nació el Euskararen Eguna, organizado por Alesbesko Euskal Kultur Taldea con la intención de que sea una jornada festiva en torno a la cultura, deporte, música y bailes.

La tercera edición se celebró ayer y atrajo a cientos de personas y contó con la presencia del grupo de dantzas Larratz Dantzari Taldea de Burlada que bailaron piezas como paloteado, trenzado, vals y otro baile conocido como El Ciego. También estuvieron presentes Tutera Kantuz, txistularis de Tudela y otras localidades tanto de la Ribera como de otras zonas de Navarra, un grupo de trikitixa de Tudela, la comparsa de gigantes de Villafranca y de Olite.

En esta ocasión los organizadores del Alesbesko Euskararen Eguna ofrecieron un acto de homenaje y recuerdo a Karlos del Villar, vecino de Beire y colaborador en la organización de las anteriores ediciones que falleció hace unos meses con 38 años. Igualmente la Ikastola Argia recibió un reconocimiento por su labor en la difusión de esta lengua, que recogió la presidenta, Maru Eriz. También recibieron placas los ganadores de los concursos de relatos infantil y de adultos Ohian Legarreta (de 9 años de Arano) y Argiñe Korta (directora de Argia Ikastola). A la comida popular asistieron 200 personas y fue servida por Catering Irene de Cadreita.